Todo comenzó cuando la esposa de Wanjiru regresó al parecer antes de lo previsto a casa y se lo encontró con otra mujer. Entonces se produjo una fuerte pelea del matrimonio, con problemas desde hace años, durante la cual la esposa habría encerrado a Wanjiru y a la otra mujer en el dormitorio.
El atleta de media maratón saltó, entonces, de un balcón de seis metros de altura y al caer se produjo graves heridas. Según la policía cayó con el rostro hacia abajo y sangraba de la boca y la nariz.
Sin embargo para las autoridades, el deportista, de 24 años, se habría suicidado. Previamente había tenido una fuerte discusión con su esposa en Nyandarua, al noroeste de Nairobi.
“El hecho es que Wanjiru cometió suicidio”, afirmó el portavoz de la policía nacional keniana, Eric Kiraithe.
Wanjiru fue el primer keniano en ganar en Pekín 2008 la medalla de oro en la maratón, la única categoría de atletismo en la que el país tenía posibilidades.
En abril del año siguiente marcó en Londres su mejor tiempo, de 2.05.10 horas, y ganó la competición.
También ganó la maratón de Chicago en 2009 y 2010. Con esta última victoria se coronó como vencedor de las principales maratones del mundo 2009/2010 y obtuvo por ello 500.000 dólares.
A nivel privado le acompañaban desde hace tiempo muchos problemas. Tras una violenta pelea matrimonial en diciembre de 2010 fue acusado de amenazas de muerte, pero su esposa acabó retirando los cargos, al igual que un guardaespaldas que había sido herido por Wanjiru.
El deportista los había amenazado con un rifle Kalashnikov y a causa de ello debía presentarse la semana próxima ante una corte por posesión ilegal de armas.
Su esposa desmintió a principios de año una supuesta reconciliación y dijo que había pedido el divorcio. En enero Wanjiru se lastimó una mano en un grave accidente automovilístico y hace cuatro semanas no estuvo en la maratón de Londres por una lesión en la rodilla.
Télam
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