El hecho ocurrió el martes por la tarde en una vivienda del barrio San Isidro de la ciudad capital cuando la policía fue alertada de que un menor de un año y diez meses falleció aparentemente cuando estaba comiendo y se atragantó con un chizito.
La madre, en el momento que se ahogaba su hijo, lo llevó de inmediato a un centro de salud que está en las inmediaciones pero los médicos que atendieron al niño no pudieron salvarlo. Trabajaron en el lugar efectivos de la comisaría jurisdiccional y el médico en turno de la fuerza, quien dictaminó en primera instancia que la muerte se habría producido por un broncoaspirado por ingesta de comida.
La víctima fue identificada como Luciano T. de un año y diez meses. Él y su madre, una joven de 18 años de nombre Micaela Toledo se encontraban cerca de las 18 del martes en la vivienda ubicada en la manzana 16 casa Nº8 del barrio de San Isidro.
El niño estaba comiendo chizitos y de un momento a otro se atragantó con la comida. De inmediato su progenitora lo llevó al Centro de Atención Primaria de la Salud ubicado en el barrio, cerca de la vivienda del niño, pero en ese lugar no pudieron reanimarlo, según indicaron fuentes policiales.
En la seccional 15º realizaron las actuaciones judiciales del caso por cuestiones de jurisdicción al lugar en donde ocurrió el hecho.
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