Tartagal :Por beber, jugar y ejercer violencia familiar es condenado a estudiar

Doctora Sandra Sanche

Un hombre que no cumplía con sus obligaciones familiares, ejercía violencia familia y consumía su dinero en bebidas y en jugar a las cartas, fue condenado por una jueza de Tartagal, a terminar sus estudios secundarios. La magistrada se refirió al “efecto negativo” de los planes sociales.
“Si ella ya está cobrando, para qué le voy a pasar”, dijo ante la jueza un hombre que se negaba a cumplir con los deberes de alimentación familiar, refiriéndose así a la situación de su exconcubina quien, además, lo había denunciado por violencia familiar.



La magistrada lo condenó, entonces, a seis meses de prisión de ejecución condicional, imponiéndole como regla de conducta terminar sus estudios secundarios siguiendo el plan para adultos de tres años de cursado y la obligación de abstenerse de abusar de bebidas alcohólicas y ejercer actos de violencia en contra de su ex pareja.

En el fallo, la jueza en lo Correccional, de Garantías y Menores de Segunda Nominación de Tartagal, Sandra Sánchez, consideró que cuando el acusado respondió que no debía cumplir con la alimentación familiar porque su exconcubina cobraba un plan social, el hombre manifestaba su irresponsabilidad y convicción de que no tiene obligaciones con sus tres hijos y recordó que “creer que porque cobra el salario (cuando lo cobra) no tiene más obligaciones, sí es ignorancia total, máxime cuando lo que eventualmente gana lo consume en reuniones de amigos para beber y jugar a las cartas”.

Ante este cuadro de “ignorancia total”, la jueza le impuso la obligación de cumplimentar su educación secundaria al tiempo le prohibió el abuso de bebidas alcohólicas, el juego y la violencia hacia su expareja.

Del fallo de la magistrada se desprende, además, una interesante apreciación al hacer referencia al “efecto negativo de los planes sociales” que se traduce en la falta de incentivo a la búsqueda de trabajo ya que el hombre dijo durante la audiencia que no salía a buscar empleo porque su mujer “ya tiene un beneficio social”.

Esta es una de las primeras veces en que la Justicia hace alusión a una cuestión que, desde el punto de vista político, puede resultar fundamental para la captación de votos pero que en el marco de un equilibrio social puede producir efectos negativos como los apuntados por la jueza puesto que una conducta como la de este hombre termina afectando, principalmente, a sus hijos provocando una verdadera desarticulación de los verdaderos objetivos de una ayuda social de las características apuntadas.