Un hombre quedó detenido luego de que su compañero de vivienda le contara al personal médico del hospital de Centenario que las graves heridas que tenía en el rostro eran producto de un feroz ataque sufrido a manos de su propio amigo durante un intento de abuso. La víctima, de 37 años, que sufre una discapacidad visual, se resistió a las patadas, lo que habría originado la ira del agresor, de 41, que le rompió una botella en la cabeza.
Dos versiones de una misma historia tuvieron que escuchar los efectivos de la Comisaría Quinta, quienes acudieron el domingo a las 3 de la madrugada a una vivienda de Centenario, ubicada sobre Paso de los Libres entre Comodoro Rivadavia y Puerto Madryn, en el sector oeste de la ciudad.
Hasta allí fue un móvil de la unidad tras la denuncia de un supuesto hecho de robo y el pedido de una ambulancia.
“Al llegar al domicilio había dos hombres, uno de ellos con heridas cortantes en el rostro. En ese momento, el otro hombre relató que ambos estaban en la vivienda y que habían sido víctimas de ladrones”, confió una fuente cercana al hecho.
Inmediatamente se convocó al lugar una ambulancia que trasladó a ambos al hospital para su atención. Los dos serían amigos y compañeros de trabajo. Se cree que se desempeñaban como cuidadores de unos terrenos ubicados al pie de la meseta.
“Acordate lo que hablamos”, repitió en varias oportunidades a su amigo herido el hombre que lo acompañaba. Ante la insistencia, mientras su amigo y víctima era asistido, el personal médico comenzó a sospechar y le solicitó que esperara fuera de la sala.
Pese a la intimidación, y aprovechando que su fiel e interesado amigo se había alejado, pudo contarle la verdad al personal que le realizaba las curaciones.
Ante la sorpresa del médico y el enfermero, confesó que el hombre que demostraba preocuparse por su mejoría era realmente el responsable del ataque. “Este hijo de puta me quiso violar”, fueron las palabras utilizadas.
Conociendo la gravedad de los hechos y que el hombre disminuido visual estaba amenazado por quien intentó abusar de él, personal del hospital llamó nuevamente a la Policía.
Más tranquila, la víctima le relató a los uniformados que se había resistido a las patadas porque no puede ver con claridad y que sólo puede advertir bultos. Esta reacción hizo enfurecer al agresor, que lo terminó lastimando de un botellazo en la cara.
El hombre quedó internado por un traumatismo facial grave. “Tenía cortes por toda la cara”, describió otra fuente involucrada.
El agresor, que aguardaba en la sala de espera del hospital, fue detenido bajo la carátula de averiguación del hecho.
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