“Benno” arrebató las balas de una bolsa, que su dueño Larry Brassfielden había dejado
en la cama. Cuando la veterinaria Sarah Sexton llevó a cabo la operación, dijo: “Fue la cosa más loca, nunca he visto nada igual. “Sólo espero que no lo vuelva hacer, porque tal vez no tenga tanta suerte la próxima vez.
A sus cuatro años de edad “Benno” no solo ha comido balas, también osos de peluche, monedas, piedras, y ropa.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario