Según la televisión estatal Rustavi-2, al menos seis leones, cinco tigres y trece lobos circulan sin rumbo por la ciudad. Fuerzas especiales de la policía y grupos de cazadores recorren el lugar en busca de los animales salvajes para volver a ponerlos bajo dominio, pero dadas circunstancias extremas que allí se viven, se vieron obligados que ejecutar a un león, un oso, un tigre y una hiena.
Los vecinos de un barrio llamado Nutsubitse aseguraron a un canal de televisión que vieron pasar a una pantera negra. A su vez, en el mismo canal mostraron las imágenes de un hipopótamo que fue sedado en pleno centro de la ciudad y hablan de que habría 30 animales del zoológico sueltos.
Los servicios de emergencias se encuentran colapsados por los llamados y mensajes de ciudadanos que aseguran haber visto depredadores en distintas zonas residenciales.
Tres de las ocho personas que murieron fueron encontradas en el zoológico, que tras inundarse hizo posible que las fieras se fugaran. Por estos momentos, helicópteros sobrevuelan los barrios que se encuentran en las inmediaciones.
El primer ministro georgiano, Irakli Garibashvili, señaló que "Tiflis no ha conocido una catástrofe natural de estas dimensiones" y que "la situación es compleja".
El agua inundó viviendas, calles y plazas, mientras que el fuerte viento que acompañó la tormenta tiró árboles, arrancó techos, destrozó rutas y partes de edificios. Los medios locales hablan de decenas de familias que se quedaron sin hogar y de que unas 20 personas, por lo menos, se dirigieron a los servicios médicos de la zona con heridas graves.
El mayor daño fue provocado por el río Vera, que pasa por el centro de la capital georgiana y se salió de su cauce.
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