Abusar de esta postura constantemente puede acarrear consecuencias muy negativas para sus frágiles piernas, según advierten médicos del Centro Nacional de Penfield, en EEUU. De hecho, con el paso de los años pueden sufrir problemas de desarrollo como consecuencia de esta mala postura corporal a edades tempranas. El porqué es muy sencillo. Mientras el niño está sentado en la posición W, difícilmente su espalda puede mantenerse recta, lo que provoca que se fuercen otras zonas como caderas, rodillas y tobillos.
Inevitablemente en un futuro surgirán los problemas de espalda si esto no se corrige desde bien pequeños. Y es que sentarse durante mucho rato en esta posición puede llegar a provocar un acortamiento ligero de los tendones.
Pero como a todos los niños hay que darles una alternativa siempre que se les prohíbe hacer algo, lomejor es sugerirles que se sienten como los indios (con las piernas cruzadas) o de rodillas. Esta es la única forma para que no tengan problemas en el futuro.
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