La vigésima entrega de los premios Gardel estuvo llena de sorpresas. La principal fue la presencia del gran ganador de la noche, Charly García , que se "guardó" hasta el final de la ceremonia para aparecer en escena.
Ya en la entrega previa, que se realizó por la tarde y no fue televisada, el ex Serú Girán se había hecho acreedor de cuatro de los siete galardones a los que estaba nominado. Todo un augurio para celebrar su regreso con gloria a la composición, los estudios de grabación y los shows en vivo.
Con el correr de la noche, García volvió a imponerse en la categoría mejor álbum de artista masculino de rock, pero ante su ausencia lo recibieron Rosario Ortega y el Zorrito Von Quintiero, integrantes de su banda. Por eso, cuando al final de la ceremonia se reveló que Random era el álbum del año (y por ende, García el merecedor del Gardel de Oro), todos los presentes se sorprendieron al ver subir al escenario al músico para recibir la estatuilla de manos de su amigo Palito Ortega.
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